DB InfraGO, la gestora de las infraestructuras ferroviarias alemanas, ha anunciado una revisión de su ambicioso programa de renovación integral de la red ferroviaria, que afectará a más de 40 de los corredores más transitados de Alemania.
Tras meses de críticas por los cierres totales de líneas (como el llevado a cabo durante 5 meses entre Frankfurt y Manheim en 2025) y los retrasos acumulados, la compañía estatal propone extender el calendario de obras hasta 2035, cuatro años más de lo previsto inicialmente.
El objetivo es reducir el impacto de los cierres y responder a las demandas del sector, especialmente del transporte de mercancías, que consideraba el plan original demasiado agresivo y con rutas alternativas insuficientes.
El nuevo enfoque mantiene los trabajos ya programados hasta 2026, como el cierre total durante nueve meses de la línea Berlín-Hamburgo a partir de agosto. Sin embargo, a partir de 2027 las renovaciones se espaciarán en el tiempo.
Por ejemplo, la modernización de Frankfurt-Heidelberg se retrasa a 2030 y la de Lübeck-Hamburgo a 2028. Otras líneas clave, como Würzburg-Treuchtlingen, Aquisgrán-Colonia o Minden-Wunstorf, verán sus obras pospuestas hasta finales de la próxima década.
El sector ferroviario ha acogido con cautela la propuesta, valorando la menor concentración de cierres y la posibilidad de planificar mejor los desvíos y la logística. El plan definitivo se consensuará en un foro sectorial y deberá ser aprobado por el Gobierno federal.