El gobierno de Finlandia ha anunciado la conversión de su red ferroviaria del ancho ruso (1.524 mm) al estándar europeo (1.435 mm), una decisión histórica que refuerza su integración con la Unión Europea y la OTAN.
El cambio, presentado por la ministra de Transportes Lulu Ranne durante una reunión de ministros nórdicos en Helsinki, responde a la necesidad de mejorar la movilidad militar y la seguridad regional, especialmente tras el ingreso de Finlandia en la OTAN y ante la creciente tensión con Rusia.
El proyecto, que comenzará en el norte del país cerca de Oulu, busca eliminar los obstáculos técnicos que dificultan el transporte de tropas y mercancías entre Finlandia, Suecia y Noruega.
Se prevé que el gobierno tome la decisión final antes de julio de 2027, con el inicio de las obras alrededor de 2032. La financiación europea será clave: la UE podría cubrir hasta el 50% de los costes de planificación y el 30% de la construcción.
La transición, que costará miles de millones de euros, afectará a más de 9.200 km de vías y tomará décadas. Simboliza un giro geopolítico y estratégico para Finlandia, que con esta decisión se alinea plenamente con las infraestructuras europeas.