Talgo ha iniciado una nueva etapa este 17 de diciembre con la entrada de nuevos accionistas y la vuelta de su sede social a Rivabellosa (Álava), en un movimiento que pone fin a dos años de incertidumbre para el fabricante ferroviario.
El denominado Consorcio Vasco —integrado por, el fondo Ekarpen Private Equity, las fundaciones BBK y Vital, y el Gobierno Vasco— ha cerrado junto con Clerbil (sociedad del presidente de Sidenor José Antonio Jainaga) la compra del 29,76% del capital social de Talgo (concretamente el 29,76327% según menciona ElEconomista.es) por 156 millones de euros al fondo Trilantic.
La operación se complementa con la entrada de la SEPI como accionista relevante y con una refinanciación integral de 770 millones para asegurar la estabilidad financiera del grupo. Este paso se produce una vez que la Junta de Accionistas avaló la operación el 12 de diciembre.
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La familia Oriol pierde el control de Talgo
El cambio accionario supone un relevo histórico: tras 84 años, la familia Oriol pierde la presidencia del consejo de administración. El pacto de gobernanza concede al Consorcio Vasco la capacidad de designar al presidente de la compañía y a Clerbil el nombramiento del consejero delegado.
Durante el primer consejo celebrado con la nueva estructura, Talgo cesó a Gonzalo Urquijo y ascendió a Rafael Sterling como nuevo director general. Ingeniero de telecomunicaciones y MBA por la Universidad de Deusto, Sterling cuenta con una amplia experiencia en Irizar y Talgo. Ejercía de director comercial del fabricante desde septiembre de 2022 y director de operaciones desde noviembre de 2024.
En el ámbito institucional, el consejo ha incorporado a José Antonio Jainaga y Maite Echarri como consejeros dominicales por el Consorcio Vasco, junto con la próxima designación de José Antonio Sánchez Corchero (SEPI), Arantza Estefanía y Ricardo Chocarro como nuevos miembros.
Además, la Junta Extraordinaria convocada para el 27 de enero en Álava ratificará estos nombramientos y la nueva estructura de gobierno.
La operación también consolida la posición financiera de Talgo. El nuevo préstamo y las líneas avaladas por CESCE permitirán sostener los proyectos internacionales con Deutsche Bahn, Flixtrain y los ferrocarriles egipcios, y fortalecerán el compromiso industrial con País Vasco, donde la planta de Rivabellosa seguirá produciendo todos los coches de la gama Talgo Avril.
Con esta reconfiguración accionarial y la presencia activa de instituciones públicas y privadas vascas, Talgo refuerza su arraigo territorial y abre una nueva era bajo liderazgo compartido y visión de largo plazo.