Los operadores de titularidad pública Northern, LNER y TransPennine Express han comenzado a coordinar sus planes de mantenimiento en el depósito de Heaton, en Tyne & Wear, con el objetivo de optimizar la capacidad y reducir la congestión en estas instalaciones compartidas.
Hasta ahora, cada compañía organizaba sus tareas de forma independiente, lo que generaba cuellos de botella y problemas de espacio, especialmente durante los cambios de horario ferroviario, cuando las rutinas habituales se alteran.
Para maximizar el uso de las instalaciones y la eficiencia de los movimientos de los trenes en el depósito, propiedad de Northern, los tres operadores (que forman parte del Department for Transport Operator (DFTO), el operador del Departamento de Transportes), colaboran entre ellas para crear un único plan de mantenimiento.
Tricia Williams, directora general de Northern, ha destacado que esta cooperación permite “entregar un plan seguro y funcional que satisface las necesidades de ingeniería de cada operador y, al mismo tiempo, maximiza la capacidad del depósito, algo crucial en los momentos de cambio de horario”.
El éxito de esta iniciativa en Heaton ha llevado al DFTO a planificar su extensión a otros depósitos del país, siendo Neville Hill, en West Yorkshire, el siguiente en la lista.