Los usuarios de Cercanías León, línea León-Guardo, han solicitado sin éxito la incorporación de trenes de la serie 2500 de FGV, recientemente retirados de la red del TRAM d’Alacant, como recoge Diario de León.
La reivindicación busca paliar la grave escasez de material rodante que afecta al servicio y su escasa fiabilidad.
Estas unidades, son idénticas a las de la serie 526 (ex 2600 de Feve) que circulan actualmente en la línea C-1 de Cercanías León. Ambas provienen de una reforma similar de la serie 2300 fabricadas entre 1966 y 1973. Las valencianas, adquiridas por FGV en su creación, prestaron servicio hasta finales de 2024 en la línea Alicante-Denia.
La petición, planteada tanto por usuarios como por plataformas de defensa del ferrocarril, busca evitar que estos trenes acaben siendo vendidos a terceros países mientras León padece una alarmante falta de vehículos y piezas de recambio.
La situación ha generado que los transbordos en autobús sean cada vez más frecuentes, aumentando el malestar entre los viajeros y dificultando el acceso al centro de la ciudad.
A pesar de la insistencia ciudadana, la Administración no ha dado respuesta a esta demanda, optando por alternativas como el refuerzo de los transbordos en bus eléctrico, una solución que los usuarios consideran insuficiente.