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Introducción a las comunicaciones ferroviarias

En nuestra vida cotidiana utilizamos todo tipo de aparatos electrónicos y de comunicación, para relacionarnos e intercambiar conversaciones con familiares, amigos, desconocidos y en general, con el mundo que nos rodea. En el ferrocarril también son necesarios estos medios, con el objeto de transmitir informaciones entre los distintos agentes que prestan servicio en la red ferroviaria y así garantizar una circulación segura y regular.

Antiguo teléfono de campaña de Renfe, uno de los elementos más peculiares de las comunicaciones ferroviarias verbales. Foto: © Museo del Ferrocarril.
Antiguo teléfono de campaña de Renfe, uno de los elementos más peculiares de las comunicaciones ferroviarias verbales. Foto: © Museo del Ferrocarril.

Las comunicaciones ferroviarias pueden ser escritas o verbales. Estas últimas, en las que nos centraremos en este artículo, deben evitar confusiones y malentendidos, por lo que han de ser claras y concisas. Por ello, el emisor de una comunicación verbal tiene que comprobar que el receptor la ha comprendido correctamente. Además, ambos agentes deben identificarse mutuamente. Por motivos de seguridad, las comunicaciones ferroviarias verbales siempre son grabadas.

Una de las cosas más importantes en este campo son los telefonemas. Consisten en la transmisión a distancia de un texto determinado. En otras palabras, los telefonemas son un tipo de comunicación que queda registrada por escrito pero que se transmite por voz.

Equipos empleados en las comunicaciones ferroviarias verbales

Las comunicaciones verbales, no serían posibles si no fuera por los siguientes equipos físicos de comunicación:

  • PCR (Puesto Central de Radio). Es el equipo de comunicación del que se dispone en un centro de mando CTC (Control de Tráfico Centralizado), en una estación o en un PM (Puesto de Mando).
  • PMR (Puesto Móvil de Radio). Es el equipo de comunicación, también conocido como Tren- Tierra, que se encuentra en las cabinas de conducción de los trenes.
  • PPR (Puesto Portátil de Radio). Es un walkie talkie utilizado por el personal que realiza operaciones en tierra, siendo este el único aparato de comunicación del que disponen.
  • PFR (Puesto Fijo de Radio). Son instalaciones que es encuentran situadas a lo largo de la vía, tienen como finalidad dar la cobertura necesaria entre el PCR, los PMR de los trenes que circulan por la red y de los PPR de los agentes que realizan operaciones en tierra. En resumen, El PFR es que hace posible las comunicaciones entre agente ferroviarios.
  • Teléfonos de campaña. Este aparato es dotación de los trenes que circulan por líneas en las que no existe cobertura de radiotelefonía. Cuando se requiere la comunicación de un tren con el PCR, el maquinista tendrá que abandonar la cabina de conducción del tren con el teléfono de campaña, enchufarlo a uno de los conectores que se encuentra a pie de vía para estos casos y girar varias veces la ruleta que hace funcionar su sistema para poder entrar en contacto con el PCR.

Esto es válido para el ferrocarril convencional, pues las líneas de alta velocidad tienen un funcionamiento muy distinto.

Las dos modalidades más usadas

Para mantener una comunicación efectiva e inmediata entre el personal ferroviario, se utilizan varias modalidades o señales de radio. A día de hoy, en el ferrocarril convencional las dos más utilizadas son:

  • Modalidad A. Con una señal de gran magnitud e intensidad, se utiliza para la comunicación inmediata entre los maquinistas y el personal que dirige la circulación ferroviaria en toda la red.
  • Modalidad C. Con una señal de escasa magnitud y poca intensidad, esta modalidad es utilizada para comunicaciones entre los distintos agentes en un recinto ferroviario determinado.
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